¿Ingenierías a la basura por las ingenierías de valor?
Por: Luis Gerardo Ramirez Gonzalez
Director de Proyectos de Grupo Diryge
Generalmente durante el proceso de la planeación como parte de su ejecución, es llevar a cabo Ingenierías de valor, estas las realizamos mediante la comparación de diferentes sistemas evaluando capacidades, necesidades y su costo, para definir un diseño con el mejor costo/beneficio para el proyecto, donde lo primordial es lograr un mejor desempeño o cuando menos su equivalente, durante ese proceso debemos presentar cuando menos dos opciones distintas a nuestros clientes y decidir en conjunto cuál es la mejor para el proyecto, existe una cantidad enorme de posibilidades para resolverlas y es imposible explorarlas todas, pero las que se ejecutan son las que deberán cumplir con los requerimientos del proyecto.
¿Entonces qué sucede cuando ya hemos definido en base a la conveniencia del proyecto un sistema y posteriormente se nos ofrece otra alternativa que al parecer pudiera funcionar?
Cuando se nos presenta una opción que creemos viable y que por consecuencia tendrá que modificar la Ingeniería origen, antes de aceptarlas como tal, es necesario entender todo lo que puede afectar, como administradores debemos ser bien cautos con este tipo de situaciones, dimensionar lo que pudiera impactar en el plan de proyecto y a su resultado. Esto parecería ser fácil, pero las ingenierías deben de resolverse de manera integral, no pueden llevarse a cabo de manera aislada, todas interactúan entre sí y esto toma tiempo, el no hacer los cruces de las mismas incrementa el riesgo de cometer errores, provocando sobrecostos y sorpresas. Hay que entender que la intención de los proveedores y/o contratistas siempre será hacer negocio y a ellos no les importará si existen impactos hacia al proyecto.
Los proveedores ofrecen mejores resultados económicos con sus propuestas, cambiando las especificaciones, pero ellos desconocen cómo se resolvieron el total de las ingenierías y qué condiciones requirieron entre sí, al hacer sus ofertas esperan que nosotros como administradores, aceptemos hacer las modificaciones al resto de las mismas y que el proyecto absorba los costos.
Las ingenierías que se generan en el plan de proyecto son para construirse, esa es la intención de elaborarlas, no debieran de convertirse en basura o descartarse por el simple hecho de que exista otra forma de resolverlas, cuando algún proveedor o contratista haga una propuesta de Ingeniería de valor y les sea aceptada; ellos deberán ejecutar el total de las ingenierías que se vean impactadas por su propuesta, que absorban sus respectivos costos y que asuman la responsabilidad que eso implica, si bajo estas condiciones ellos ofrecen llevarlo a cabo, lo que es poco probable, deberán cumplir con la premisa más importante de las ingenierías de valor que es obtener un mejor desempeño con un menor costo hacia al proyecto.
Otra manera de hacerlo sería lanzar los concursos en el formato de diseño y construcción, entregando solo las bases de diseño con un alcance bien definido, esto no es lo más adecuado pero es mejor hacerlo así que desperdiciar los esfuerzos elaborando ingenierías que al final del día no serán de utilidad, el problema de este tipo de esquema es que todos ofertarán de manera distinta y siempre pudieran existir partidas que no se considerarán dentro de los alcances con los posibles sobrecostos que esto implica.
Nuestra función es asesorar a nuestros clientes, proporcionarles la información más completa para que se puedan tomar decisiones acertadas, en grupo Diryge tenemos todas las herramientas para resolver las ingenierías de valor con la firme intención de obtener el mejor resultado para el proyecto, incluyendo el formato de diseño y construcción.